Soy Juncal Roldán, creadora de TÚyTEA

Mi objetivo es hacer pedagogía sobre el TEA y ofrecer información veraz y fiable a padres y profesionales acerca del espectro del autismo y todo lo que tiene que ver con su complejo día a día

Mi nombre es Juncal Roldán, además de periodista y experta en Trastorno del Espectro Autista por la UNIR, soy mamá de un niño con TEA. Como a mí, a muchos de vosotros seguro que os surgen muchas dudas. Por eso he creado TÚyTEA.

Un espacio que nace para dar respuestas a la infinidad de preguntas que surgen en el día a día de una persona con Autismo o Asperger.

Aquí tendréis entrevistas y consejos para familias y profesionales de la mano de los mejores expertos en neurología, logopedia, pedagogía, terapia ocupacional o psicología.

Todo de manera gratuita, porque solo juntos y apoyándonos tanto padres como cuidadores conseguiremos hacer de este mundo un lugar justo para tod@s.

Espero que os pueda ayudar. Ese es mi objetivo.

Mi día a día como madre de un niño con TEA

Soy madre de un niño con autismo y comparto contigo muchas cosas. No estás solo. Yo también he sentido angustia cuando sus igual escomenzaban a hablar y el no, cuando no me miraba a los ojos, ni siquiera al dedo cuando señalaba.

Cuando les decía a todos pasa algo y todos me decían que esperara, ya hablará…Sentí también que el mundo se tambaleaba cuando por fin me dijeron: Sí, algo pasa... ¿Y qué es? Le llamaron retraso del desarrollo, y trastorno del lenguaje después. Por fin TEA; trastorno de espectro autista.

Y he pasado horas como tu mirando en internet, buscando respuestas, pensando que era un error…y llorando. También para mí ha sido difícil ir a cumpleaños donde ni él se acercaba a ningún niño, ni ningún niño a él. He evitado en días más tristes llevarle un parque infantil, y sí, me he alegrado cuando sacando fuerzas de flaqueza fuimos al parque y alivio…no había nadie.

Seguro que también has tragado saliva cuando un desconocido se ha acercado y le ha preguntado ¿cómo te llamas?, ¿te ha comida la lengua el gato? no...Discúlpele, (siempre pidiendo disculpas) no habla. ¿No? ¿Eres tímido? No, señora, tiene autismo...Vaya, pobrecito, con lo guao que es, no lo parece…Zaaaas! Sí, has sentido bien la angustia de la incomprensión de la sociedad, de la familia incluso... ¿Qué debe parecer un niño con autismo?¿Un ser de otro planeta?

Daría lo que no tengo por verle en las fotos del cole cerca de sus compañeros... Por entrar en una tienda de juguetes y que me pidiera todos, salir a la calle sin estar en permanente estado de alerta, ir ala playa sin temer que escape y caiga o se tire al agua sin entender su peligro, que durmiese bien, que comiese, poder ponerle un disfraz, un gorro, cortarle el pelo o las uñas sin que se desatara su ira... por poder ir a a una celebración familiar tranquila o al cine, o a donde sea...

Haría un pacto con el diablo porque señalase lo que le gusta, o acudiese a mí cuando le llamo…Tengo la sensación, quizá te suene, de que hay dos mundos en este, el que yo vivo con mi hijo y el de los demás. Y por ello quiero protegerle el día que yo no esté, y no dejaré de luchar para que cuando eso ocurra tenga una vida y un mundo que le comprenda como a el le obligan a comprender al mundo. Soy madre de un niño con autismo y comparto contigo muchas cosas: sé que es imposible un amor mas inmenso que no existe felicidad mayor que la de ese instante en que cruza su mirada con la tuya que son sus pequeños grandes logros tus grandes satisfacciones.

Estoy empezando a entender con él, que el mundo no es el mundo, es solo nuestra forma de percibirlo. He descubierto que lo que nos rodea no es como nos habían contado que era...que hay mil formas de verlo y sentirlo…y he notado de nuevo el viento en la cara como si fuese nuevo, he observado el humo de un café al igual que un niño un truco de magia, y el canto de los pájaros como el más especial de los conciertos...estoy empezando a entender que el mundo no es el mundo, es solo nuestra forma de percibirlo.  

No estás solo, soy madre de un niño con autismo, y eso meda, como a ti unos preciosos superpoderes.

Los objetivos de TÚyTEA

Cuando tienes un hijo con TEA hoy, empiezas a ser consciente de lo mucho que queda aún por hacer en nuestra sociedad para lograr la inclusión real y efectiva de las personas con neurodiversidad: una escuela adaptada, espacios accesibles, formación para el empleo, estabilidad laboral, empatía, relevancia social...

Hay por ello aún mucho que hacer para que los derechos de las personas con discapcidad, reconocidos en la Constitución, sean una realidad tangible.

Y es aquí donde comienza la labor de TÚyTEA: lograr un futuro laboral conforme a las preferencias y destrezas de cada persona con autismo, lograr espacios residenciales dignos e independientes donde puedan desarrollar su vida conforme a sus gustos.


Ese es nuestro objetivo. Esa es nuestra tarea. Y TÚ eres parte imprescindible de ELLA. Esto es TÚyTEA.